viernes, 18 de diciembre de 2009

Episodio 19: “Pruebas”

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19 hrs. [Escena del Crimen]

Todos los detectives se reúnen en la sala de la casa de los Rojas Cárdenas. EL comisario se dirige a ellos se forma autoritaria.

-Señores. Llego el momento de detener a los culpables de este crimen macabro. Tenemos dos sospechosos y no tenemos pruebas tangibles aun. Es por eso que tenemos esta orden de cateo en la casa de María Rojas, hermanastra de Marcelo Rojas. Hay pretendemos encontrar pruebas que incriminen a Cristian Rojas y su posible cómplice María Rojas. Una de las forma de poder atrapar a nuestra criminal es haciéndola confesar su crimen, por eso yo utilizare mi cita de hoy para hacerla hablar. Iré con micrófonos en ese instante ustedes entraran a su casa, la barrerán y encontraran todas la pruebas necesarias para inculpar a Cristian. Señores es nuestra oportunidad. Cualquier paso en falso que demos podría ser fatal. Bien muchachos… a trabajar.

19.30 hrs. [Camino a casa de María]
-Manuel escúchame, tratare de hacer confesar a María, pero necesito que dirijas el cateo en su casa primero, confió en que este el arma del homicidio ahí aun. Y después de eso mandes un grupo al restaurant para la detención de María.

-Comisario, Carlos, este es el momento, tu instinto de detective nunca ha fallado, por algo eres el mejor de esta ciudad.

-Gracias. Recuerda no perder de vista a Cristian, y hacerlo lo más rápido posible. Una vez adentro del restaurant y terminen con el cateo se podrán movilizar sin problemas y sin levantar sospechas, así María no se dará cuenta de nada.

20.20 hrs. [Casa de María]

-Detective Manuel hemos encontrado la parte que faltaba de la carta que estaba en la pieza del sospechoso, además en el basurero de la calle encontramos este cuchillo con sangre.

-Excelente. ¿Cristian nos vas a confesar porque asesinaste a tu familia ahora?

-No –grita Cristian.-

-Leamos la parte de la carta que cortaste. Para ver si te refresco la memoria.
“…tan cautivantes como los tuyos, cuando nos escapamos por primera vez y nos amamos.
Ese amor que parecía ser puro y para siempre. Las circunstancias impidieron que siguiéramos juntos, pero mi cariño hacia a ti no cambiara jamás. El hecho de haber estado amándote un tiempo me impide estar tranquila al lado de tu padre, de quien me enamore perdidamente. Pero tienes que entender que el corazón no lo manda uno. …“


-Ya estas recordando… si no te terminare de leer la carta, Cristian. –Le dice el detective Manuel con un tono intimidador.

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