martes, 20 de octubre de 2009

Episodio 03: “Detención”

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8:30 AM

Suena un timbre, y una mujer sale a abrir la puerta en pijamas.

-¿Quien toca a esta hora el timbre?, ¿Quiénes son ustedes? -Pregunta la mujer.-

-¿Es usted la Señora Elizabeth Núñez? –Pregunta el Comisario Carlos.

-Sí, soy yo, pero ¿Quién es usted?

-Queda detenida por ser sospechosa del asesinato de la familia Rojas Cárdenas.

Dos policías entran rápido a la casa para evitar que tratase de escapar.

-Señora Elizabeth, la acompañaremos para que pueda vestirse y acompañarnos a la comisaria donde será interrogada.

-¿Qué?! Me están inculpando de un asesinato, yo no eh sido, soy inocente eso se lo aseguro.

-Lo siento pero tiene que acompañarnos. Señores policías acompañen a la Señora Elizabeth a su habitación a para que se vista y luego llevárnosla a la comisaria.

9:20 AM [En la Comisaria]

El comisario entra en una habitación con un espejo, lugar en el cual tienen a Elizabeth detenida. El comisario se sienta frente a ella para interrogarla.

-Quiero saber porque estoy aquí si yo no eh hecho nada! –Vocifera llorando.-

-Señorita Elizabeth, encontramos pruebas que la indican como la principal sospechosa del asesinato a la familia Rojas Cárdenas, encontramos su billetera en el lugar de los hechos, además usted con esa familia tenía una relación muy particular.

-Mi…billetera, Mi billetera fue robada hace días.

El comisario la ve atentamente, un silencio corto hace mostrar que el ambiente esta tenso.

-Señorita Elizabeth, sabemos que fue amante de Don Marcelo Rojas, y que usted quería tener una relación más “estable” con él.

-Así es. Fuimos amantes hasta hace casi 6 meses. Y si lo amaba. Pero…pero yo no tengo motivos para matarle a él ni a su familia. Además usted me dice que encontró mi billetera, y yo le digo que mi billetera me la robaron hace días.

En ese instante irrumpe Manuel y se acerca al Comisario Carlos y le susurra algo al oído.


-Me acaban de indicar señorita Elizabeth que efectivamente dejo una constancia en carabineros por el robo de su billetera, pero puede ser una simple coartada.

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